Consejos para cuidar tu férula

Para garantizar la eficacia, comodidad y durabilidad de tu férula, es importante seguir unas pautas básicas de uso y mantenimiento.

🧭 Uso y adaptación

Cepíllate los dientes antes de colocar la férula. Así evitarás la acumulación de bacterias y restos de alimentos.
Colócala siempre con los dedos, nunca mordiéndola, para evitar deformaciones o roturas.
Durante los primeros días es normal notar una leve presión sobre los dientes. Esta sensación suele desaparecer con el uso progresivo.
Es frecuente que aumente la salivación al principio. Aclara bien la férula después de cada uso para evitar que se formen depósitos difíciles de eliminar.

🧼 Limpieza y mantenimiento

Lava la férula con agua fría y un cepillo duro, distinto al que usas para los dientes, para mantener su forma y eliminar residuos.
Realiza una limpieza más profunda una o dos veces por semana con pastillas específicas para aparatos dentales.
Si dispones de una cuba de ultrasonidos, puedes utilizarla para eliminar bacterias y depósitos de forma más eficaz.

Un buen mantenimiento diario ayuda a prolongar la vida útil de la férula y a mantener una correcta higiene.
Si notas molestias o tienes dudas, no dudes en consultarnos.